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transforma tu empresa con vanesa ramos es un podcast semanal donde te daré herramientas y técnicas para mejorar tu empresa gracias a la tecnología. Episodio 1.

Metaverso parte II: plataformas y empresas

By Podcast No Comments

En este segundo episodio dedicado al metaverso te explico algunas de las plataformas que están desarrollando metaversos ahora mismo y distintas aplicaciones para las empresas. Las notas del podcast vienen cargaditas, así que apunta esto para no perderte nada.
Para buscar en Google: Metamask y Unity. De nada.

Antes de nada, como siempre, te dejo el episodio en Spotify y en el resto de plataformas: Podimo, Spreaker, Ivoox, Google Podcast, Apple PodcastYoutube.

Además, te recuerdo: este post es un resumen de todo el contenido que doy en el episodio. Ahí doy mucho, mucho más de lo que hay aquí.

Este es el último episodio de la cuarta temporada del podcast y en él voy a tratar de aclarar varios puntos que quedaron pendientes en el episodio anterior donde hablaba del metaverso.

Déjame decirte antes de nada que vienen las notas del podcast pero que bien cargadas. Espero abrirte a un montón de nuevos mundos, así que agárrate que vienen curvas.

Te contaba en el episodio anterior que no existe un único metaverso, que hay varias plataformas que se están dedicando a desarrollarlos y que es algo que ya existió pero que aparentemente en esta ola viene para quedarse. Tienes que tener claro que la idea es que tu identidad digital quede vinculada entre todos los diferentes metaversos, es decir, que si le has comprado a tu avatar las zapatillas de Nike de edición limitada en el metaverso de Meta, cuando te vayas al metaverso de otra plataforma a interactuar, esas zapatillas te sigan perteneciendo. Eso es posible gracias a la tecnología blockchain a los contratos inteligentes y a las billeteras o Wallets que básicamente, son un DNI digital. No, no tienen tu nombre y tu apellido, sólo un conjunto bastante largo de dígitos y letras pero a la que tú y sólo tú tienes acceso.

Si quieres investigar sobre billeteras, busca información sobre Metamask en Google. Te dejo el nombre en las notas del episodio.

Dos temas importantes que no llegué a comentar en el episodio anterior son:

Punto número 1: Aparte de ser incorpóreo y de que se debería poder interactuar con los demás usuarios, el metaverso debería tener persistencia. En palabras de Edward Castronova, investigador de videojuegos y mundos virtuales la persistencia es hacer que nuestra vida dentro del metaverso goce de continuidad. El metaverso, deberá por tanto evolucionar. Igual que nosotros vemos a nuestro universo físico hacerlo todos los días.

Punto número 2: el metaverso ideal debería ser descentralizado. No debería pertenecer a nadie y al mismo tiempo, nos debería pertenecer a todos… La tecnología Blockchain garantiza que todas las transacciones dentro de un mundo virtual sean públicas, fáciles de rastrear y seguras en todo el mundo. La forma de interactuar con las empresas será como lo hacemos en el mundo físico: comprando, vendiendo, consumiendo y construyendo relaciones con las marcas.

Si no has visto la película «Ready Player One» de Spielberg ya estás tardando. Está basada en un libro del mismo nombre que son fogonazos de nuestra infancia. Pero explica bastante bien qué sería este o estos Metaversos.

Fortnite, el videojuego, precisamente aprovecha esa interacción entre tecnologías y personas. En Fortnite ocurren eventos que hacen que a la misma hora millones de usuarios de todo el mundo se conecten al videojuego. Y músicos como Travis Scott o Ariana Grande, colaboraron con el videojuego durante la pandemia haciendo allí sus directos.

Te decía que había varias plataformas desarrollando metaversos y empresas que empezaban a apostar por este entorno virtual.

Todos sabemos, sobre todo por el bombo que le dan, que Meta – o sea Facebook – está desarrollando su metaverso aprovechando que también son propietarios de las gafas de realidad virtual Oculus. En 2021, Facebook anunció la creación de 10.000 empleos en Europa durante los próximos cinco años para desarrollar el metaverso. Cosa que me gustaría ver.

Una recomendación, poned a vuestros hijos a aprender Unity. Me lo agradeceréis en unos años.

El metaverso que está construyendo Zuckerberg sería un metaverso de blockchain centralizado.

otro lado, están los metaversos blockchain descentralizados. Estos tienen una economía virtual completamente autónoma controlada por los usuarios. Es el caso de Decentraland o Sandbox.

Decentraland está basado en blockchain y funciona sobre la red Ethereum. Utiliza su propia moneda para los pagos, llamada MANA. Con está criptomoneda, el usuario puede comprar una parcela dentro del metaverso y transformarla a su antojo para luego visitarla. Puedes hacer tus propios edificios. Dentro de Decentraland se han creado ciudades, plazas, universidades e incluso una versión de Las Vegas. Te dejo en las notas del podcast un vídeo de Youtube donde la visitan.

También te he dejado un enlace para que conozcas The Sandbox, que es otro metaverso construido sobre blockchain. En él, los usuarios interactúan en un enorme mundo virtual similar al Minecraft.

Por otro lado tenemos a Epic Games, la creadora de Roblox o el propio Fortnite que ha anunciado fuertes inversiones para desarrollar esa visión a largo plazo. En este ajo también se ha metido Sony de lleno para aportar la tecnología referente al entretenimiento.

Roblox, sería un ejemplo de metaverso tradicional con características parecidas a los metaversos de blockchain.

Google, Apple y Microsoft por supuesto, también están trabajando en el desarrollo de aplicaciones y herramientas para formar parte de este nuevo universo virtual.

Alejándonos de empresas tecnológicas, Nike presentó hace un tiempo una realidad paralela ubicada llamada Nikeland que permite a los usuarios hacer ejercicio o vestirse con la ropa de la marca.

Zara, tampoco quiere perderse la fiesta y esta temporada ha lanzado sus primeras colecciones de moda NFT en el universo Zepeto. Que por si no lo conoces, es una aplicación donde los usuarios crean sus avatares en diferentes mundos algunos creados por ellos mismos. Te dejo el enlace, por supuesto, en las notas del episodio.

No sólo Zara… hablamos de marcas como Balenciaga, Prada, Ralph Lauren, Gucci… todas ya han lanzado proyectos al respecto.

También BMW está trabajando en ello porque entre sus planes está crear una réplica exacta de una de sus fábricas para enseñar allí a sus trabajadores o hacer pruebas virtuales que luego se trasladarían a la vida real.

Hay contabilizadas ya más de 100 marcas que apuestan por el metaverso. La únicas preguntas que quedan ahora por hacerse son: ¿Se volverá mainstream? ¿Se volverá común? ¿Convergerá a un único punto? ¿Colapsará?

Hablamos de algo a largo plazo. 10/15 años de desarrollo es mucho tiempo y tienen que llegar muchas cosas en ese tiempo… pero yo espero vivir al menos 40 años más así que igual hay que darle el beneficio de la duda a Zuckerberg que sí acertó con Facebook… aquí también puede que acierte.

Aunque a mi su universo me ponga los pelos de punta.

Notas:
Qué es el metaverso
Oportunidades del metaverso
Qué es Roblox
Explorando Las Vegas en Decentraland
Qué es The Sandbox
Qué es Zepeto, donde Zara lanzó su línea de ropa NFT

Espero que el post y el capítulo te hayan resultado interesantes y si quieres saber más o necesitas ayuda, ya sabes dónde estoy.

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Metaverso: qué es y para qué nos sirve a las empresas

By Podcast No Comments

Si algo nos queda claro últimamente es que la palabra metaverso aparece por todas partes (quizás no y es como cuando una embarazada no para de ver otras embarazadas o carritos de bebés por la calle) asociado a avatares más bien simplones y a cosas que nos suenan a viejuno. En este episodio sobre el metaverso, te aportaré mi perspectiva teniendo en claro varias cosas: sí, esto ya existió. El videojuego World of Warcraft sigue existiendo. La diferencia está en la cadena de bloques o blockchain y en los NFT’s.

Antes de nada, como siempre, te dejo el episodio en Spotify y en el resto de plataformas: Podimo, Spreaker, Ivoox, Google Podcast, Apple PodcastYoutube.

Además, te recuerdo: este post es un resumen de todo el contenido que doy en el episodio. Ahí doy mucho, mucho más de lo que hay aquí.

Hoy voy a tocar una de esas tendencias de las que estoy segura que has oído hablar pero que quizás no tengas claro lo que es o cómo puedes sacarle rendimiento: El ya famoso metaverso. Vaya por delante que esto es un futuro que no está inventado, que empieza a haber movimiento gracias, aunque no te lo creas a los NFT pero poco más.

Si no sabes qué son los NFT le dediqué un episodio, en realidad tres, eran una serie, que te dejo enlazadas en las notas del podcast.
Básicamente, gracias a los contratos inteligentes, a la red de blockchain ethereum, podemos dotar de unicidad, de pertenencia, a objetos digitales. Algo que antes no podíamos hacer porque copiar y pegar en internet es extremadamente sencillo. Y lo que es peor, parece que no somos conscientes de que las cosas que hacemos también tienen propiedad… Que se lo digan a los de la Sexta que últimamente está en boca de todo Twitter por aquello de copiar/soltar aunque los propios creadores les digan que no, que no les apetece…

El caso es que está todo explicado en ese podcast. No voy a extenderme en ello.

Qué es el metaverso

Si buscas en Google, qué es el metaverso el sistema te arroja: 9.720.000 resultados

9 millones de páginas están ya destinadas a definir algo que aún no sabemos qué va a ser.

En palabras de la Wikipedia: Los metaversos son entornos donde los humanos interactúan e intercambian experiencias virtuales mediante uso de avatares, a través de un soporte lógico en un ciberespacio, el cual actúa como una metáfora del mundo real, pero sin tener necesariamente sus limitaciones.

Pues nada, que ya está. Aquí se acaba el podcast de hoy porque venía a contarte qué es el metaverso y ahí lo tienes… En fin. Que 9 millones de entradas sobre algo que se define en menos de un minuto nos dan pistas.
¿De qué? pues o hype o catacrac.

Intento anterior: Second Life

Y si miras el enlace de la wikipedia que te dejo en las notas, verás que esto del metaverso ya había sido inventado en 2003 que fue cuando hizo su aparición Second Life. No sé si te acuerdas. Yo sí. Intenté entrar pero lo abandoné.
Pero es cierto que marcas, partidos políticos, hicieron aparecer sus sedes en Second Life.

Se interactuaba a través de un avatar, podías explorar el mundo, socializar, tener sexo virtual… y donde hay sexo, hay dinero… o al revés. Tenía su propia moneda local, llamada Linden Dolar, si no voy mal.
Tuvo un buen nivel de crecimiento al principio con seguidores muy activos y llegó a definirse como “el juego de la era”. Pues no sé. Oye. Visto así, con los años… que el juego llegó antes de tiempo.

Te dejo otro enlace de la wikipedia por las notas para que conozcas más del juego.

La realidad era que en 2003 algunos equipos no estaban preparados ni conectados a Internet (en mi casa la instalamos en 2004 y en la universidad había ADSL…). En España hasta 2005 no se empezaron a hacer pruebas de fibra óptica. Así que cuando digo que en 2003 no era el momento de Second Life, por lo menos, repito, aquí… no voy tan desencaminada.

Algo así debió ver Google cuando en 2008 presentó un proyecto similar llamado Lively (como Blake) y que no llegó a seis meses.

Second Life tiene competencia Red Light Center, Active Worlds, There, Entropía Universe, Multiverse y la plataforma de código libre Metaverse.

Pero esto de “eso es más viejo que yo” tampoco tiene que cegarnos en que el futuro que aparentemente llega va por esa vía.

Habrá varios metaversos

Volvemos a oir hablar del metaverso gracias al sr. Zuckerberg, ese que nos enganchó a Facebook, compró Instagram y nos tiene a todos cogidos de los teléfonos por Whatsapp.

En Meta o sea, Facebook, tienen claro que van a palmar pasta como campeones los próximos años para construir ese mundo tridimensional que gracias a las Oculus, también suyas, podremos disfrutar.

Y eso es un punto interesante que ya te apuntaba antes, no hay un único metaverso. Cada empresa que pueda, acabará haciendo el suyo. Blockchain viene a solucionar que tú seas tú en todos esos metaversos. Da igual la apariencia física que tengas, eso no importa, importa que tengas una dirección asociada, un código, el de tu billetera, por ejemplo, donde se almacena toda tu identidad de blockchain.

Por dar algo más de contexto, una billetera no es más que una aplicación asociada a tu e-mail y con unas contraseñas que te identifica de forma unívoca en Blockchain. Hay una clave pública, una dirección que viene a ser similar a las URLs a las que estamos acostumbrados, y tú puedes acceder a lo que contenga esa billetera mediante contraseña y sólo si se te pierde dicha contraseña, a través de una serie de palabras clave en un orden específico.

Esa billetera, esa dirección pública, es tu identidad de blockchain. Y esto es lo que nos permitiría viajar entre metaversos. Que tu identidad esté asociada a una billetera te permite “ir con todo tu equipaje” de uno a otro lado.

Actualmente, hay unas cuantas plataformas de metaverso, las más conocidas son Decentraland, Roblox, SandBox y por supuesto, Meta. Pero de todo esto, no voy a hablar hoy porque habrá parte dos de este episodio donde “toquemos” un poco más esa realidad.

Aplicaciones del metaverso

Hace poco, asistí a una sesión en el metaverso de IEBSchool. La realidad era que con el avatar, te podías mover por el espacio, bastante limitado en cuanto a diseño en 3D y para interactuar se utilizaba el chat. Algo, como ves, que puede asemejarse mucho al Second life de 2003. Allí nos dieron una conferencia sobre aplicaciones del metaverso. Que también estaba siendo transmitida en Youtube, las cosas como son.

Entrar al metaverso, era una excusa. Una forma de ver que existe esa posibilidad, que hay empresas que desarrollan metaversos a medida y que es factible, casi para cualquier empresa, empezar a trabajar o al menos, empezar a conocer, más sobre esa plataforma.

No estaba mal para una primera experiencia. Me consta que hubo muchos asistentes divididas en varias salas, asumo que por la capacidad de los servidores.

Yendo un poco más allá, la idea del metaverso implica que las grandes empresas trasladarán sus operaciones a ese espacio para que los empleados puedan trabajar y relacionarse desde cualquier lugar.

Casos concretos del uso del metaverso

Aquí ya empezamos a hacernos preguntas:

¿Puede Zara trasladarse al metaverso con todo el proceso productivo? ahora mismo no. En un futuro muy muy lejano donde nos hayamos cargado del todo el planeta y ya no exista la necesidad de ir vestidos por la calle, pues igual sí. Eso si sigue manteniéndose el sistema como en la actualidad, con gente que mantenga servidores, internet, electricidad y asumiendo que los monos no nos llevarán la delantera en algún momento… cosa que dudo.

En el caso de Zara, al final, hay un apartado físico que sigue requiriendo interacción real. La fabricación de las prendas.

Y ojo, pongo Zara pero puedo decir cualquier otra marca que produzca elementos físicos. Esto, como digo, da para otro podcast porque que Coca-cola produzca bebida, como bien cuenta Fernando de Córdoba en su libro los secretos de las marcas, Coca-cola tiene merchandising a rabiar con seguidores acérrimos y coleccionistas que pagan bastante dinero por una botella antigua… Y si tienes eso en el mundo real… qué te impide hacerlo en el virtual. Pequeño spoiler, en el próximo episodio te cuento más de aplicaciones reales del metaverso.

En cualquier empresa, hay muchos apartados operacionales que no necesitan localización porque los empleados pueden interactuar a través de Slack o de Teams sin necesidad de estar viéndose todos los días. Esto nos lo ha demostrado la pandemia. La diferencia está en cómo adaptar lo que tú haces, el valor que produces, a un mundo virtual. Coca cola, lo tiene claro. Zara, también.

La realidad es que ese impulso ahora mismo nos resulta chocante. No lo conocemos, nos suena de algo, creemos que se trata de una idea vieja que si no triunfó antes no tiene por qué hacerlo ahora. Sin embargo, no podemos negar que ahí hay algo. En el siguiente episodio, te cuento quienes están empezando a moverse por esos metaversos y en qué se está convirtiendo esta palabra que tanto oyes últimamente.

Notas:
Episodios anteriores hablando de la tecnología blockchain:
Blockchain: qué es y cómo funciona
Smart contracts o contratos inteligentes
NFT explicado para humanos
Criptomonedas: todo lo que siempre quisiste saber y nunca te atreviste a preguntar

Definiciones de Metaverso:
Qué es el metaverso
Conociendo Second Life
Posibilidades del metaverso

Espero que el post y el capítulo te hayan resultado interesantes y si quieres saber más o necesitas ayuda, ya sabes dónde estoy.

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Criptomonedas: todo lo que siempre quisiste saber y nunca te atreviste a preguntar

By Podcast No Comments

Estamos hartos de oir hablar de criptomonedas. Este episodio es un quién es quién. O qué es qué. Qué son, más o menos lo sabemos, pero por qué hay tantas, cómo se compran y se almacenan o por qué gastan tanta energía, quedará todo aclarado en este episodio.

Antes de nada, como siempre, te dejo el episodio en Spotify y en el resto de plataformas: Podimo, Spreaker, Ivoox, Google Podcast, Apple PodcastYoutube.

Además, te recuerdo: este post es un resumen de todo el contenido que doy en el episodio. Ahí doy mucho, mucho más de lo que hay aquí.

Con las criptomonedas, voy a cerrar arco de los episodios relacionados con el blockchain.

Aclaremos conceptos: qué son las criptomonedas, cómo se usan, cómo se almacenan, cómo funcionan y por qué dicen que son tan terribles para el medio ambiente.

De nuevo, no soy experta en criptomonedas. Jamás se me ocurriría decirte que invirtieras en ellas y si inviertes en ellas, es bajo tu riesgo total y absoluto. Que yo lo haga no implica que tú tengas que hacerlo. Mi madre siempre nos decía eso de “si fulanito se tira por un barranco, tú qué? vas detrás?” Pues eso.

Te recuerdo además, que en los episodios anteriores te expliqué blockchain, los contratos inteligentes y los nfts. Todo ello sin duda está relacionado con el tema de hoy: las monedas virtuales o criptomonedas.

Pero qué son? Cómo se usan?

Qué son las criptomonedas: bitcoin

A estas alturas has oído sí o sí hablar de bitcoin. El bitcoin es una moneda virtual. Sirve para comprar productos o servicios con la diferencia de que al estar sobre la red de blockchain, no existe una autoridad certificadora que se responsabilice de su emisión o que nos registre los movimientos. Mejor dicho, no existe una única autoridad. La propia red es la autoridad, como te conté en el episodio 46.

Todo el mundo está de acuerdo en que es una moneda. Así que sí. Es como si nos pusiéramos todos de acuerdo en que a partir de ahora, los bolígrafos son una moneda. Si nos ponemos de acuerdo TODOS, pues lo es.

Tienen las mismas características más o menos que las monedas normales. Y fue creado por Satoshi Nakamoto. Esto también te lo conté en el episodio 46 del podcast. La idea es crear una moneda virtual, no física, que pueda usarse para comprar y vender cosas en internet. Además, como es programable, puedes asignarle determinados comportamientos y vincularlas a los contratos inteligentes (episodio 47).

Minado de bitcoin

La primera de las criptomonedas fue el bitcoin. El creador (o creadores, ya sabes que esto no se sabe) decidieron hacerla como el oro. Es decir, escaso y finito. Hay un número máximo de bitcoin. 21 millones. La idea que tenemos es que si algo es escaso, tiene más valor que aquello que no lo es, por eso se creó así.

Y al igual que el oro, los bitcoin se minan. Seguro que has oído la frase: minado de bitcoin. Pues es que es exactamente igual que el oro… Mediante operaciones matemáticas, demasiado complejas como para que te lo cuente por aquí, puedes conseguir nuevos bitcoin mediante el minado. Por cierto, en las notas del podcast, os dejo un enlace a un post de Xataka y otro a las preguntas frecuentes sobre bitcoin donde se explica rematadamente bien todo este tema.

Por resumir, minar bitcoins significa que se invierte capacidad de ordenadores para procesar las transacciones y conseguir que todos los usuarios de la red estén sincronizados. De nuevo, os remito al episodio 47.

¿Cualquiera puede ser un minero? Sí. Siempre que tengas software y hardware especial. Estamos hablando de poner a tu ordenador a revisar todas las transacciones anunciadas que se van a hacer en la cadena de bloques, en el blockchain y a resolver los problemas matemáticos que son bastante difíciles de calcular (del orden de miles de millones de cálculos por segundo) para que las transacciones queden confirmadas. Por hacer estos cálculos, se premia a los mineros. Ejemplo: digamos que compro 1 bitcoin (ya me gustaría). Pues una parte de ese bitcoin cuando se efectúe la transacción y quede registrada en blockchain, va a parar a los mineros.

Cada 10 minutos aproximadamente se “descubren” por decirlo así, nuevos bitcoin. ¿Por qué cada 10 minutos? Porque es el tiempo que tarda aproximadamente, la resolución de esos problemas matemáticos complejos que los generan.

Otras criptomonedas

Al igual que hay bitcoins hay otras monedas virtuales. En realidad casi todo el que se empeñe puede conseguir una moneda virtual porque adivinad qué, es programación.

Digamos que te enfadas con el tema de que no te gusta que haya un número limitado de bitcoins. O que eso de las transacciones es un coñazo, que pasas de minar y lo quieres hacer más eficiente. Te creas tu propia moneda. Ese no es el problema, el problema está en convencer a los demás que tiene algún valor.

Algo así es lo que ha pasado con Bitcoin Cash, Ether, con Ripple, con Cardano… y por supuesto con nuestro amigo Dogecoin… Dogecoin, pequeño inciso, se creó con la idea de reírse de las monedas virtuales y del bitcoin en particular. Y a Elon Musk le hizo gracia. De ahí lo de Dogecoin to the moon porque le hace gracia que esa moneda, que empezó como una broma, pueda llegar a sustituir a las monedas más serias.

Como digo, todas estas son monedas virtuales. No todas están en la misma red, es decir, lo habitual es que cada una tenga su red, su cadena de bloques propia.

Ether opera sobre Ethereum que, como hablamos en el episodio 48 es la red en la que puedes desarrollar aplicaciones distribuidas y contratos inteligentes con mayor facilidad. Todas esas escisiones de la moneda principal (bitcoin y bitcoin cash, por ejemplo) se conocen como forks.

En el caso de bitcoin hubo una discrepancia entre la propia comunidad. Mucha gente decía que bitcoin no fue creada para pagarte el café con él y otros mucho sí. Así que en 2017 se separaron. Bitcoincash es más ligera de operar, por eso se pueden hacer muchas más operaciones en menos tiempo.

En el caso de Ether, pasa un poco igual. Sigue un sistema propio que lo hace más “ligero”. Y por favor, entiéndase ligero como: más ágil a la hora de descifrar y cifrar las operaciones, distinto tamaño de bloque, distinto tipo de hash (que es una función criptográfica para codificar los datos de forma que se genere una cadena de caracteres única), menor consumo de energía, etc.

Energía necesaria para el minado

Por que sí, todas esas transacciones consumen energía. Evidentemente. De ahí que hace poco Tesla (bueno, Elon Musk) dijera: podéis pagar vuestro coche con bitcoin y a las pocas semanas soltara un “bueno, ya no”. No es muy lógico para una empresa que pretende cambiar el mundo con baterías solares, que permita pagar con algo que consume energía a manos llenas.

El gasto energético de bitcoin es similar al de un país grandecito. Se estima que gasta tantos teravatios hora como Argentina. Australia gasta unos 70 teravatios más que las transacciones de btc.

Por el otro lado, si preguntas a la comunidad la respuesta es “Y TÚ MÁS”. Es cierto, hay muchísimo gasto de energía en hacer que funcionen las tarjetas de crédito, los cajeros, los vehículos que transportan las monedas… Pero no puedes comparar el número de transacciones efectuadas con tarjetas de crédito en el mundo en una hora, con el número de transacciones realizadas en bitcoin en esa misma hora porque sales perdiendo. Por mucho.

En el estudio de Cambridge que te dejo en las notas dice que el 39% de la energía que se gasta en las transacciones de criptomonedas es energía renovable. Bueno, ojalá. Al final si queremos apostar por estas monedas tienen que ser suficientemente eficientes.

Wallets

Entonces, tenemos un puñado de monedas virtuales, que podemos comprar y vender a través del minado en el caso del bitcoin o de su compra/venta generalizada a través de webs o aplicaciones. Pero qué pasa, que estas monedas tienen que almacenarse en algún tipo. Es decir: necesitas una herramienta para comprar o acceder a la compra/venta de este tipo de monedas y otra herramienta que te sirva de monedero virtual y aquí entran los wallets. Que son exactamente eso. Un monedero virtual donde se almacena el bitcoin que tú has adquirido, por ejemplo.

Hay aplicaciones que sirven para las dos cosas, pero a largo plazo, teniendo en cuenta que bitcoin es algo parecido al oro y que muchos analistas piensan que se acabará convirtiendo en el nuevo patrón oro… quizás no es mala idea alejarlo del sistema que usas para hacer la compra venta. Por lo que pueda pasar.

Igual que con el oro hay muchísimas personas buscando bitcoins, pero también hay algunos que se roban y por supuesto, otros se han perdido para siempre.

Normalmente los billeteros de monedas virtuales, los Wallet, tienen bastante nivel de seguridad y ya te puedes acordar de la contraseña y en algunos casos, las 16 palabras de seguridad y códigos de identificación que hay para acceder a la misma en caso de pérdida u olvido de la contraseña…

Hay casos famosos de personas que han olvidado que tenían bitcoins y ahora que el precio está bastante alto (a la hora de grabar el podcast, un bitcoin son cerca de 30mil euros) intentan acceder a ellos y no es factible porque no se acuerdan de la contraseña.

Conclusiones

Por resumir e ir finalizando el episodio, desde el punto de vista de una persona que ha programado apostar por este tipo de monedas descentralizadas, es un sí. Cómo hacerlo ya es otro tema. A toro pasado, haber invertido en bitcoin hace 10 años hoy te hubiera convertido en millonario. Es un mercado altamente volátil y con muchísimo riesgo. Hay mucha gente que ha perdido mucho dinero. Y sí, hay otros que han ganado muchísimo.

¿Hay futuro en la cadena de bloques? Sí, sin duda. Hay empresas que ya están subiendo sus archivos a blockchain para que todo quede cifrado, verificado y firmado sin pérdida alguna de la datos.

También es cierto que hay un problema y es que blockchain y ordenadores cuánticos, no se juntan para nada. Pero, bueno, el tema de los ordenadores cuánticos es literalmente otro mundo que espero tocar en algún momento.

Notas:

https://www.bbc.com/mundo/noticias-46037430

https://www.buybitcoinworldwide.com/es/cuantos-bitcoins-hay/

https://www.xataka.com/servicios/bitcoin-la-tecnologia-detras-de-la-moneda-p2p

https://bitcoin.org/es/faq#mineria

https://www.jbs.cam.ac.uk/faculty-research/centres/alternative-finance/publications/3rd-global-cryptoasset-benchmarking-study/

Espero que el post y el capítulo te hayan resultado interesantes y si quieres saber más o necesitas ayuda, ya sabes dónde estoy.

transforma tu empresa con vanesa ramos es un podcast semanal donde te daré herramientas y técnicas para mejorar tu empresa gracias a la tecnología. Episodio 1.

NFT explicado para humanos

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En este episodio abordaré, ya, por fin, qué es un NFT, qué relación tiene con las criptomonedas, qué son los tokens y cómo se relacionan con esto… Y todo está relacionado con blockchain (episodio «Blockchain: qué es y cómo funciona») y contratos inteligentes (episodio «Smart contracts o contratos inteligentes»).

Espero que os quede claro qué es un NFT y cómo funcionan, cómo es posible que se estén vendiendo a chorrón y qué utilidades podría tener esta tecnología en el futuro.

Antes de nada, como siempre, te dejo el episodio en Spotify y en el resto de plataformas: Podimo, Spreaker, Ivoox, Google Podcast, Apple PodcastYoutube.

Además, te recuerdo: este post es un resumen de todo el contenido que doy en el episodio. Ahí doy mucho, mucho más de lo que hay aquí.

En el anterior episodio tomamos contacto con los contratos inteligentes y te hablé de una forma de “pago” con la que pueden vincularse estos contratos.

Además de pagar mediante una moneda normal y corriente, euros, dólares o monedas virtuales, está la posibilidad de pagar con los tokens que no son más que fichas, activos digitales, que van unidos a un valor y que son generados por nuestra empresa o nuestro proyecto o incluso puede ser un proyecto ajeno. Te decía que está la opción de comprar tokens para obtener beneficios sobre nuestro producto o servicio. En el mundo físico, son los cupones de descuento o tickets regalos que hay en cientos de establecimientos.

Qué es NFT

Pues bien, voy a explicarte ahora qué es un NFT en castellano, quiere decir, non fungible token. O activo digital no desgastable. Vamos a tirar de RAE y definir fungible como algo que se desgasta con el uso. El dinero, es un activo fungible. Un escritorio, una silla, son bienes fungibles. Según lo vamos usando, se desgasta.

Entonces un NFT es algo, que de base, no se desgasta con el uso. Entrando aún más en harina, un NFT se define como un registro en una red de blockchain que a su vez, está asociado a algo digital. Ese algo digital, pueden ser imágenes, código, o sea, programas, textos digitales, vídeos…

Es decir, tenemos un sistema (blockchain y en concreto la red Ethereum) que permite programar algo (contratos inteligentes) de forma que queda unívocamente unido a por ejemplo, una imagen. ¿Cómo sabemos que están unívocamente unidos? Porque está programado en la cadena de bloques. Y si recuerdas, en el primer episodio te contaba que lo que se subía a blockchain era casi imposible de falsificar ni modificar porque para cambiar ese registro hay que cambiar todos los demás, usando algoritmos que, si bien no son irrompibles, son MUY difíciles de quebrar.

Vamos un paso más allá. Esos registros, esos NFT’s, contienen información sobre el propio archivo. Al ser posible programarlos puedes hacer, por ejemplo, que cada vez que se vende ese activo, el creador, el programador, recibe una comisión por venta.

Ejemplo básico: supongamos que tenemos una colección de cromos y cada vez que hay un intercambio de cromos, el creador se lleva una comisión. Eso sería un NFT si fuera digital y estuviera programado en blockchain. ¿Entiendes por dónde voy? Basta crear algo digital, asociarlo a un registro en una red de blockchain (repito, Ethereum) y programarlo de forma que si algo ocurre con ello, tú te lleves dinero.

Implicaciones

Ahora, ¿por qué hay tanto revuelo con esto? Porque es la primera vez que a los creadores digitales SE LES ESTÁ REMUNERANDO por su trabajo. Llámalo trabajo, ¿ok? Sí, para alguien igual es una chorrada pero también lo eran los youtubers hace años y mira, un trabajo como otro cualquiera con su cotización de autónomos. Como otro cualquiera no, pero ya sabes qué quiero decir. ES un trabajo.

Hasta hace nada, si un creador de contenido digital (cualquiera que tuitee medio bien, lo es) o un artista que hacía obras en su ordenador, tenía la capacidad de subirlo pero… por lo general, nadie te pagaba por ello.

Hemos usado y reído mil veces con cientos de memes o gifs sin tener que pagar por ellos, ¿verdad?
Ahora, ¿qué pasaría si cada vez que usáramos uno de esos memes se pagara una comisión al creador? Que estaríamos remunerando de verdad a su creador.

Al no ser físico, tenemos tendencia a pensar que NO es real… es digital, son ceros y unos, impulsos magnéticos, pero son reales… Y precisamente por eso, son fácilmente copiables.

Un ejemplo

Imaginemos (estoy muy imaginativa hoy, lo sé) que tienes a un amigo que crea un cuadro digital. Nadie te impide copiarlo y pegarlo. Que se lo digan, por ejemplo, a Juan Ramos (no es pariente) autor de fotografías que acabaron a la venta en Leroy Merlín sin que nadie le diera un duro… Bueno, es que ni le pidieron permiso. Se sorprendió cuando los vio allí delante de sus narices al entrar en una tienda…

El copiar y pegar donde me plazca está a la orden del día en Internet, todo el mundo lo sabe… SI ESTÁ EN INTERNET ES GRATIS. Dejamos para otro día este tema, ¿ok?

Como te decía, tu amigo crea un cuadro que no está en formato físico, sólo en un archivo. Ahora y gracias a bockchain, podría unir ese cuadro de forma unívoca a su autor. Esa pieza, por tanto estará siempre vinculada a su creador. A su autor. Gracias a blockchain se ha creado un certificado de autenticidad. Con esta tecnología te estás asegurando que tu firma siempre estará en tu obra. Así de sencillo.

Pero aún hay más, falta la parte del intercambio y de la compra. Y ahí entra la programación que te contaba antes.

Supongamos que tu amigo crea y tokeniza su cuadro digital. Y además le mete algo de programación, de forma que, cada vez que su cuadro se venda él se lleva un 5% de comisión. Ahora, sólo tiene que subirlo a una galería (o plataforma, más bien) de arte digital. Chimpun.

¿Lo puede hacer cualquiera? Prácticamente. Hay gente que está vendiendo sus memes. Hay dos memes que ya han sido vendidos por su creador por cantidades astronómicas. Otros están vendiendo dibujos de sus hijos.

Otras aplicaciones

Pero esto no sólo aplica a cuadros o arte digital.

Jack Dorsey el creador de Twitter puso a la venta su primer tuit. Y acabó con 3 millones de dólares en los bolsillos.

Aplica a videojuegos. Puedes comprar unas zapatillas Gucci virtuales para tu personaje en, no sé, digamos Los Sims. El que haya creado esas zapatillas (lo lógico sería que fuera Gucci) puede haberle metido programación de forma que cada vez que se pongan las zapatillas, reciban una comisión.

Si conoces Fortnite sabes que puedes comprar armas mejores o bailes para tu personaje. Si alguien crea un arma súper especial y la “convierte” en NFT puedes acabar pujando en alguna plataforma para obtenerla… de la misma manera que ahora pujamos por cuadros, revistas o cualquier elemento coleccionable y revalorizable con el tiempo.

Otro ejemplo: En todos los eventos tenemos las entradas digitales, que por lo general es un código Bidi o de barras. En ningún momento, tienes la confianza de que esa entrada es original. Supones que es original porque la has comprado y te la han enviado al correo pero todos sabemos lo vulnerable que son ambas cosas… Hasta el punto que si te roban el PDF del correo y alguien la usa antes, ya no puedes usarla tú…

Ahora pueden certificarse que esas entradas son únicas, originales e intransferibles. Porque no se enviarán a tu correo, se enviarán a tu billetera, que es una dirección de internet, un monedero virtual donde tú o yo, estamos asociados de nuevo de forma unívoca con una dirección (un chorrazo de números y letras) de internet. En los billeteros, es donde se almacenan las criptomonedas y dentro de poco, podremos almacenar también este tipo de tokens.

Dicho esto, te he dejado en las notas del podcast un montón (pero un montón) de información al respecto. Puede haber cientos de aplicaciones, tantas como al programador o creador se le ocurra.

Notas:

Para qué sirve un token

Qué es un token

Bienes fungibles

Qué son los NFTs

Foto robada en Leroy Merlín

El negocio de los tokens no fungibles

Los activos digitales que están cambiando el coleccionismo

Espero que el post y el capítulo te hayan resultado interesantes y si quieres saber más o necesitas ayuda, ya sabes dónde estoy.

transforma tu empresa con vanesa ramos es un podcast semanal donde te daré herramientas y técnicas para mejorar tu empresa gracias a la tecnología. Episodio 1.

Smart contracts o contratos inteligentes

By Podcast No Comments

En el anterior podcast te hablaba de blockchain o cadena de bloques, el sistema por el cual quedan registradas las transacciones de forma que la confianza de que eso es así, te la da toda la cadena y no un organismo central como un banco o un notario. También te mencioné los smart contracts.

El objetivo de este episodio, es hablarte precisamente de eso, de los smart contracts o contratos inteligentes, de cara a que en el próximo podcast podamos abordar los NFT’s o agárrate con la palabra: non fungible tokens que tan de moda se están poniendo y método por el cuál se están pagando barbaridades en obras de arte digitales. O en memes, que pueden ser considerados así…

Antes de nada, como siempre, te dejo el episodio en Spotify y en el resto de plataformas: Podimo, Spreaker, Ivoox, Google Podcast, Apple PodcastYoutube.

Además, te recuerdo: este post es un resumen de todo el contenido que doy en el episodio. Ahí doy mucho, mucho más de lo que hay aquí.

Para hablar de NFT’s antes hay que comprender que en blockchain existe la posibilidad de programar contratos. Eso son los smart contracts o contratos inteligentes.

Hace un tiempo, os lo enlazo en las notas del podcast, os conté en vídeo una de las aplicaciones de los contratos inteligentes más allá de las criptomonedas. De hecho, en ese vídeo, hay un comentario de un usuario que habla precisamente de los “tokens”, término necesario para entender los NFT’s (non fungible tokens, recuerdas¿?) Pero repito, esto, en el próximo podcast.

Antes, hablemos de los contratos inteligentes. Y ya te adelanto, ¡esto sí puede ser aprovechado por las empresas!

Qué son los smart contracts

Decía en el vídeo que un contrato inteligente no es más que un programa informático. Se crean de forma que sea fácil verificar que se cumplen unas condiciones, lo que sería el contrato en sí y verificar que se ejecuta correctamente. Todo esto sin intervención de nadie más que de las personas que lo han programado y llegado al acuerdo de subir el contrato al blockchain.

¿Qué se sube al blockchain? El contrato, es decir, el programa por el cual, si ocurren ciertas condiciones, se realiza la transacción.

Un ejemplo que ponía en el vídeo es el siguiente: imaginemos que tenemos un contrato con una aseguradora que nos dice que si ocurren determinadas condiciones, nos pagan el dinero del seguro. Esto es programable, tú puedes programar mediante un lenguaje informático, que:
Si ocurre A y B y C u ocurre Z o Y entonces X.

Un ejemplo

Llevado aún más abajo: si ocurre una lluvia torrencial y los cultivos se ven dañados, entonces se restará la cantidad acordada (100.000€) de esta cuenta bancaria y se llevará a esta otra cuenta bancaria.

Esa programación queda almacenada en el blockchain.

Imaginemos ahora que la medición de la lluvia torrencial se hace por sensores, de forma que ese “si ocurre una lluvia torrencial” equivale a “si en el sensor que está en la ip XXXXX el valor medido pasa de 200 litros por hora”.

Lo que se procura en ese contrato es blindar todos los posibles casos. Si todas las partes cumplen lo acordado, no hay fraude. Y de esa fiabilidad da fe la propia blockchain y por supuesto otros sistemas externos que se llaman “oráculos”. Estos oráculos validan las condiciones del contrato. Cuando tienen la información que necesitan pueden decidir si una cláusula es correcta y ejecutar el contrato.

En el ejemplo que te pongo, puede haber un oráculo midiendo todo el rato el sensor. En el momento en que lee que pasa de los parámetros marcados, ejecuta el contrato y por la mañana, el agricultor se levanta con los campos destrozados y 100.000€ más en su cuenta. Es decir, es en tiempo real. Además, hay menos costes, hay menos intermediarios, no hay pérdida de información ni de fiabilidad.
Puede ser creado y ejecutado por cualquier tipo de personas, físicas o jurídicas, pero también por programas o máquinas que funcionen de forma autónoma. Tiene validez sin depender de ningún organismo debido a que es un código que es visible, es decir, todo el que quiera conocer cómo son las condiciones puede ir a mirarlo y no se puede cambiar al existir sobre blockchain.

Organizaciones autónomas descentralizadas

Los Smart contracts abren un mundo de posibilidades: gracias a su potencial aparecen los DAO’s u Organizaciones autónomas descentralizadas. Es un tipo de organización que es controlada totalmente por programas.

No quiero meterme muy a fondo porque es más complejo de contar pero te voy a poner un ejemplo rápido para que lo entiendas. Imagina una comunidad de vecinos. Todo el mundo paga unas cuotas que se usan para pagar averías y mejoras en la comunidad. Imagina ahora que en lugar de pagar en euros, mediante contratos inteligentes, los vecinos depositan los fondos en criptomonedas, en Ethers. El dinero de la comunidad estaría en manos de todos y de nadie al mismo tiempo. Hasta que no ocurra algo, el contrato inteligente tendría retenido ese dinero a la espera de tomar una decisión democrática que sería totalmente transparente. ¿Por qué? Porque es un programa visible a todo el mundo e imposible de modificar al estar en blockchain.

Imaginemos que hay que reparar la barandilla del portal. Un vecino, genera una petición. Se adjuntarían tres presupuestos y pasado un tiempo se adjudicará al presupuesto que más votos positivos tenga. En ese momento, se desbloquea el dinero. Todo esto de forma automatizada, democrática, transparente y con reglas conocidas por todos.

Ethereum

Ethereum es la plataforma más famosa en cuanto a la ejecución de los Smart Contracts. Está basada en blockchain, como Bitcoin y permite ejecutar contratos entre nodos, entre pares. Entre dos personas que así lo quieran o máquinas, vaya.

Ethereum tiene su propia criptomoneda, mineros y su propio blockchain, pero el lenguaje de programación es mucho más fácil de usar y más extenso que Bitcoin.

Hay más plataformas, pero Ethereum es la que más está apoyando este tipo de programación.

 

Criptomonedas y tokens

Ahora, si te preguntas si un Smart contract tiene que ir siempre ligado a una moneda fiat (la normal) o criptomoneda, la respuesta es no. Aquí es donde entran los “token”.

Antes de concluir el episodio y dado que en el próximo vamos a hablar de NFT’s quiero que te quedes con esto:

  • tenemos las criptomonedas( bitcoins, Ethers, etc), que más o menos tienen las mismas características que el dinero que manejamos en nuestro día a día (son fungibles, es decir, se consumen con su uso, divisibles, portátiles y con un suministro limitado. Están pensadas para sustituir al dinero físico, comprar bienes y servicios, por ejemplo. Aunque hay algunas diferencias. Dentro de las criptomonedas tenemos las “altcoins” pero en eso ahora no entramos.
  • y luego están los tokens, que son activos digitales que se pueden usar dentro de un proyecto determinado. Estos van unidos a un valor, puede ser un servicio, por ejemplo. Puede ser propio o ajeno,… Puede servir para pagar por un trabajo, pero también como incentivos. Compro tokens y puedo tener un servicio extra en tu empresa. En la vida real, puedes imaginarte un ticket regalo. O los corticoles de El corte Inglés en España. Algo que te permite acceder a un servicio extra. Antes era en papel y ahora está programado dentro del blockchain.
transforma tu empresa con vanesa ramos es un podcast semanal donde te daré herramientas y técnicas para mejorar tu empresa gracias a la tecnología. Episodio 1.

Blockchain: qué es y cómo funciona

By Podcast No Comments

Blockchain, NFT’s… todo forma parte del mismo vocabulario que, si te pasa como al resto de la gente, no acabamos de entender muy bien.

Este podcast trata de explicar blockchain de forma que lo entendamos todos, al modo: cabras, vacas y ovejas. Realidades físicas que sí podemos tocar y comprender en lugar de palabros indescriptibles e inconcebibles.

Aquí arranca un arco de tres o cuatro episodios para explicar qué son los NFT’s y por qué lo están pegando tan fuerte.

Antes de nada, como siempre, te dejo el episodio en Spotify y en el resto de plataformas: Podimo, Spreaker, Ivoox, Google Podcast, Apple PodcastYoutube.

Además, te recuerdo: este post es un resumen de todo el contenido que doy en el episodio. Ahí doy mucho, mucho más de lo que hay aquí.

Hoy no voy a hablaros de técnicas así concretas para aplicar porque me embarco en un mini arco de podcast de al menos tres, quizás cuatro, episodios para explicaros bien (o al menos intentarlo), qué son los NFT’s. Aunque no, no voy a hablar de NFT’s porque para eso hay que explicar antes qué es un contrato inteligente y, antes de esto, explicar qué es el blockchain o cadena de bloques y por qué tanto revuelo hay con esto.

Así que sí, el objetivo es explicar qué son los NFT’s pero antes, voy a intentar explicar todo lo demás.

Si lo hiciera en un único episodio nos podrían dar las uvas y mira, no es mi intención volveros locos.

Guía para escuchar estos episodios

Aquí tienes una pequeña guía para saber cómo escuchar estos episodios:

  1. ¿Sabéis lo que es blockchain? Si la respuesta es sí…
  2. ¿sabéis qué es y cómo funcionan los contratos inteligentes? Si la respuesta también es positiva, entonces podéis saltaros el episodio 46 y el 47 e iros directamente al 48. Si la respuesta a alguna pregunta es no, o queréis refrescar conocimientos, os toca ir semana a semana. Prometo no aburriros.

Entonces, vamos a empezar por el principio, porque para entender lo que es un NFT hay que ir dos pasos atrás: hay que entender qué es la cadena de bloques o blockchain y qué son los contratos inteligentes o Smart contracts. Voy a usar los dos términos de forma indistinta.

Qué es el blockchain

Hace tiempo en 2019 publiqué un vídeo explicando qué era el blockchain, o más bien cómo funcionaba. Y os lo explicaba con una historia: la de la tribu de los YAP, que me parece super representativa de cómo funciona este sistema. Esta tribu, funciona así:

  • Todos conocen qué tiene el resto de la tribu, es decir, qué propiedades pertenecena cada miembro.
  • Esto ha sido así durante generaciones.
  • Se basa en la memoria colectiva.
  • Cada vez que hay una transacción, se junta toda la tribu y se graban en su propia memoria los cambios.

Digamos ahora que eres un tío muy listo. Y supongamos que quieres derrocar al gobierno. Además quieres quitarles el poder y el control que tienen sobre las monedas y que crees que hay otra forma posible de hacerlo. Esa forma, no es más que la que utiliza la tribu de los YAP (os dejo en las notas el enlace a la Wikipedia). 

Ahí entra en escena Satoshi Nakamoto. No está nada claro quién es este señor. O señora, o grupo, o lo que sea. El caso es que en 2008 apareció un pdf bajo ese nombre (Satoshi Nakamoto) en una lista de correo de criptografía donde se describía un sistema para P2P de dinero digital. Es decir, una forma de intercambiar dinero sin ningún banco por el medio. Así se crea el bitcoin. Y para registrar los intercambios de ese dinero inexistente (como cualquier otra moneda del mundo, en este punto pero ya llegaremos ahí) se crea el blockchain o cadena de bloques, que viene a ser un libro contable. Dicho así muy sencillo para que lo entendamos todos un poco.

El blockchain, dicho en llano, es un conjunto de tecnologías que permiten que haya transferencia de valores o de activos sin nadie más por el medio.

Vale, sigo muy en abstracto, lo sé. Bajo ahora, no te preocupes.

Venga, ¿qué es entonces el blockchain o cadena de bloques? Es una cadena de registros, un sistema, una estructura de datos, que se va agrupando en conjuntos o bloques a los que se va añadiendo informaciones relativas a otros bloques de la cadena anterior en una línea temporal. 

Recuerdas lo de la tribu de los YAP, ¿no? El tema es que para registrar un intercambio de activos, todo el mundo en la cadena tiene que recordar qué había antes y qué hay ahora. Es lo mismo pero con ordenadores. Mediante criptografía, lo que hay en un bloque sólo puede ser cambiado modificando TODOS LOS BLOQUES QUE VIENEN DETRÁS. 

Un ejemplo

Voy con un ejemplo de granjeros totales. Imaginemos, Pepe quiere comprar una cabra y ahora tiene cuatro en lugar de tres. Eso se sube a la cadena de bloques donde aparece, Pepe, cuatro cabras. Luis compra una oveja después de Pepe y se registra en su bloque (en el de Luis): Luis tiene 1 oveja, Pepe tiene 4 cabras. Luego, María compra tres vacas. Se sube a la cadena y se registra en el bloque de María: María tiene 3 vacas, Luis 1 oveja y Pepe 4 cabras.

De repente, Pepe vende dos cabras y pasa a tener dos. Este cambio se registra en su bloque, pero también en el de Luis y en el de María. Es decir, TODO cambiará a la nueva información. Porque TODOS tienen que recordar las nuevas condiciones. 

Esto es lo que significa “entorno distribuido” y “base de datos pública no relacional”.

Al final, la cadena de bloques es un registro contable que garantiza la seguridad de ese dinero digital. En el ejemplo anterior, cambias animales por bitcoins y ya lo tienes.

En lugar de animales, pon objetos que sean más de nuestro día a día: casas, coches, seguros,… cualquier propiedad. Ahora quienes certifican que algo es tuyo son los bancos, los notarios, los abogados,… Sin embargo, con blockchain, quien lo certifica es el resto de bloques de la cadena.

La firma de documentos, el envío de algún documento importante,… puede hacerse por blockchain para que quede registro que se ha enviado y firmado sin posibilidad de falsificación. Los contratos públicos, también pueden subirse a la cadena de bloques.

Entre pares, entre personas, está la opción de los contratos inteligentes que hablaremos en el próximo podcast.

Principales problemas de blockchain

Son los siguientes:

  • Tiempo y potencia: como cada vez hay más bloques, cada vez hay más lentitud al modificar el bloque. 
  • Escalabilidad: hay limitaciones de tamaño de bloque de tiempo de respuesta.
  • Privacidad: en 2019 se demostró que el cifrado de blockchain no era irrompible, como se creía hasta ese  momento. Es cierto que no es fácil. Tiene muchísima más dificultad que hackear (no me gusta usar esta palabra para esto) una de nuestras contraseñas o plataformas habituales en internet, pero es factible. 
  • Sostenibilidad: principalmente, en el minado de bitcoins se consume mucha energía. Mucha más de la que puedas pensar. Esto lo veremos en el episodio de criptomonedas. 
  • Legalidad: pues hombre, precisamente es lo primero que se ha quebrado, por así decirlo. NO hay una regulación específica porque es precisamente lo que se buscaba: huir de este tipo de organismos. 

Espero que te haya quedado un poco más claro en qué consiste la cadena de bloques o blockchain. La semana que viene, hablamos de contratos inteligentes, o smartcontracts y para la siguiente NFT’s que están dando mucho que hablar.

Notas:

https://es.wikipedia.org/wiki/Yap

https://www.xataka.com/criptomonedas/satoshi-nakamoto-quien-sea-que-fuere-desconocido-creador-bitcoin-20-personas-ricas-mundo/

https://es.wikipedia.org/wiki/Cadena_de_bloques

Espero que el post y el capítulo te hayan resultado interesantes y si quieres saber más o necesitas ayuda, ya sabes dónde estoy.